El tiempo nos debora...

... No podemos hacer un alto sin alterar nuestro camino, sin que las horas pasen por nosotros, sin que los minutos queden paralizados. Pero sí tenemos la suerte de captar con nuestro objetivo lo que nuestro ojo desearía inmortalizar, aquello que la mente quizás olvide algún día y de esta manera nos podamos volver a trasladar.